Sabemos que todos los homenajes prestados a la Santísima Virgen en su mes –y en cualquier día del año– tienen como motivación última el culto debido a Jesucristo.
Nuestra Señora en Fátima dijo a los 3 pastorcitos: “Vendré a pedir la Consagración de Rusia a mi Inmaculado Corazón y la Comunión reparadora de los Primeros Sábados de mes."
La iconografía de los Ángeles del Renacimiento y del barroco, así como ciertas imágenes muy difundidas en el siglo pasado no representan auténticamente los espíritus angélicos; los de la Edad Media y los de Fray Angélico expresan la realidad.